Viaje a Tarma

El Miércoles que me llamo Marco Antonio para ir a dar una charla a Tarma de verdad no esperaba nada, mas que una charla en un pueblo algo frio de Junin. Es más esperaba que el bus partiera a las 21:00 horas conmigo directo a la aventura y que no me haga mal es soroche, sin embargo fue grande la sorpresa no solo que que el bus partiera a las diez, y que salir cueteado de mi casa en taxi no haya valido mucho dado que el ultimo día no me pude comunicar al perdérseme el cargador del celular, malazo! ni modo, a esperar una hora y cuarto en el terminal para partir a mi destino. Crei que se me iba a venir el huayco pero no, gracias a Dios mi deposito alimenticio no tuvo fugas fortuitas e hizo alarde de su fortaleza.

A la par y ya acostumbrado un poco a esto de viajar fuimos despertados por el encargado para hospedarnos en el Hotel Chavin a horas de la madrugada para descansar unos pocos minutos más para salr por la ventana y darnos con una bella mañana frente a la plaza principal, allí es cuando empecé a fascinarme de la belleza de Tarma. Nos alistamos para las primeras labores e la mañana con un rico desayuno del lugar, buenazo la verdad, dejamos el merchandising, hicimos una corta visita medica a la agencia la cual se encontraba en remodelación, y pude conocer a Luis, administrador de la agencia y a parte del personal que iba a conocer más en la charla de la tarde.

Sobrándonos ya un poco de tiempo decidimos ir a conocer un poco más y en cuanto caminamos un poco por el pueblo, el cual esta plagado de una fusión entre la arquitectura republicana y colonial del ande con los comercios y servicios completísimos que ofrece, en verdad es un pequeño pueblo con todas las comodidades y muchas sorpresas, en donde uno encuentra la calidez de un trato que no es asonante con nuestra dinámica de vida. Tomamos un taxi colectivo y fuimos a Muruhuay, dado que mi compañera, esta vez también Liliana, resulta muy devota del Sr. De Muruhuay, subimos por una carretera que e primera inundaba la vista de paisajes hermosos que traducían claramente que Tarma es la Ciudad de las flores, bastante bonito la verdad, cuando llegamos a la Iglesia del Sr. De Muruhuay me sorprendí mucho más al ver la belleza en la empinada montaña y la cantidad de fieles que se acercan a las misas regulares.

Una vez allá nos empachamos con una rica Pachamanca con su picante de cuy, acompañados de su chicha de jora, buenazos y previo a la vista de un pueblo encerrado entre dos cerros, bastante bello, me inspiro a filmar todo el camino de regreso por Acopampa y otros paisajes para regresar a dar mi charla. El clima aunque variado (Lluvia, soleado, frío) no resultaba tan molesto en verdad en comparación de los diferentes paisajes que creaba.

Procedí a dar la Charla, con un grupo igual que Satipo conformado de puras chicas, particularmente estos dos grupos de féminas han liderado las colocaciones en este año, y ya veo porque, en este caso ellas estaban lideradas por Luis, administrador de la agencia. La dinámica se hizo bastante bonita, la charla como regularmente ya la habíamos llevado, y sobre todo hice bastante énfasis en el coaching. Una experiencia bastante bonita y motivadora en realidad, la gente se divirtió, y la verdad yo también.

Para finalizar nos dimos otro paseo nocturno con Liliana para comprar alguno suvenires para llevar a Lima, recorrimos un poco mas aquellos negocios con los formatos de antes y la rica oferta actual, de verdad es un escenario que no se hace atípico, y se nota que se inclina hacia guardar el buen trato, la educación y la mesura. Compramos un poco de manjar blanco dos sabores (de esos que no he encontrado por acá) y un poco de miel. Liliana se compro una guitarra y unas muñecas re mononas y tomamos rumbo al hotel para empacar y regresar a Lima.

Tomamos el bus con calma y un poco de pena y regresamos en medio de una noche estrelladísima que en verdad fue preciosa, tal que ni Liliana ni yo pudimos dormir por mucho y nos mantuvimos conversando de muchas cosas, de verdad Liliana es una mujer muy luchadora e interesante. Bueno eso es todo, llegamos a Lima de3spues de un corto sueño, y no se porque de nuevo salí volando hacia el taxi, para llegar a casa y comentar tantas cosas bonitas que había pasado. Algunas de las fotitos las dejo aquí, y bueno ahora si quede al día con el blog, lo que me preocupa son otras cosas que también requieren de mi, cosas que definitivamente desembocaran de alguna manera en este lugar, jajaja, soy blogadicto.